A qué se denomina «coaching empresarial»
A una metodología para desarrollar el talento de las personas y de los equipos, lo que permite mejorar el desempeño, la gestión y el manejo del tiempo, generando con ello mayor crecimiento y oportunidades de negocio.
Es decir, ayuda a fomentar la comunicación entre los empleados, a desarrollar las competencias y la creatividad, logrando así que aflore el mayor potencial de los trabajadores y del equipo, aumentando así también la motivación y la productividad.
Cómo se implementa
Para implementar coaching empresarial en tu empresa debes realizar un proceso que constará de cuatro fases, que son:
Valoración y diagnóstico de necesidades: estudio y análisis de la situación actual, así como del camino para alcanzar el objetivo. Se debe explicar a la persona y/o grupo que va a recibir las sesiones de coaching cuál es el objetivo de estas. Dicho objetivo puede ser adquirir y desarrollar ciertas competencias, mejorar el rendimiento o, si es para un grupo, puede ser mejorar la comunicación entre los miembros o estudiar sus evaluaciones del desempeño.
Diseño del plan de acción: una vez tenemos el diagnóstico de necesidades pasaremos a la fase de diseñar el plan de trabajo, en el que se fijarán objetivos alcanzables, medibles, realistas, relevantes, temporales y específicos. A continuación, se define cuánto durará el proceso de coaching (número de sesiones) y que dependerá de la meta fijada. También se define el contrato, en el que estarán presentes trabajador, empresa y coach.
Puesta en marcha: se firma el contrato y se inicia el proyecto. Según el objetivo que queramos alcanzar, el número de sesiones puede varias entre 6 y 10, teniendo una duración media cada una entre 60 y 90 minutos. En cada sesión se evalúa y controla el progreso logrado, analizando así lo realizado en cada práctica y valorando, una vez vistos los resultados, si se deben redefinir o modificar algunas técnicas.
Seguimiento y evaluación: para el seguimiento se realizan informes dirigidos tanto al trabajador como a la empresa, valorando si se ha logrado alcanzar el objetivo y qué competencias se han adquirido. Este seguimiento, para saber si el resultado es duradero, deberá repetirse de nuevo a los dos o tres meses después.
Beneficios del coaching empresarial
El coaching aporta una serie de beneficios a nivel personal y a nivel grupal. Vemos a continuación algunos:
Favorece el trabajo en equipo: logra que cada miembro del grupo desarrolle y potencie sus puntos fuertes, mejorando también la comunicación grupal a través de dinámicas que aportan asimismo mayor empatía entre compañeros.
Potencia el talento individual: ayuda a que cada empleado desarrolle su propio potencial, su talento, aumentando así también el grupal.
Contribuye a la resolución de conflictos: aportando herramientas y técnicas que permitan superar los contratiempos y las situaciones complicadas, mejorando así la comunicación y el ambiente laboral.
Aumenta la creatividad: porque lleva a los trabajadores al autoconocimiento y a desenvolverse mejor en situaciones diversas, sacando al exterior su potencial creativo.
Mejora la adaptación a los cambios: el cambio constante en el mercado, la innovación y la competitividad, obligan a las empresas a modificar objetivos. Esto supone dificultades y contratiempos, a los que hay que saber adaptarse.
Aumenta la productividad: incrementa la motivación y la satisfacción personal, lo que lleva consigo un mayor rendimiento y la obtención de mejores resultados.
Reduce los posibles estados de ansiedad y estrés laboral: mejora la comunicación y promueve y buen clima laboral, lo que reduce los conflictos.
Modelos de coaching organizacional
Al igual que cualquier otro método, tiene sus técnicas y modelos. A continuación, vamos a comentar algunas técnicas; después nos vamos a centrar en los tres modelos o clases de coaching empresarial.
Dentro de las posibles técnicas o métodos a utilizar, vamos a comentar tres de ellas:
Grow: este método consta de cuatro fases obligatorias en las que el coach formula unas preguntas concretas que llevan al trabajador a la reflexión, y así guiar a este a lograr sus objetivos. En coaching nunca se hacen preguntas cerradas o que se pueden responder con un simple sí o no.
Outcomes: analiza y comprende en profundidad la situación actual y los objetivos, llevando al trabajador a niveles muy altos de desarrollo. Es un método utilizado con los líderes.
Achieve: este método consta de siete fases y busca involucrar al trabajador para que este desarrolle habilidades como la escucha activa, el feedback, la intuición, la realización de preguntas… Para esto evaluará la situación actual, planteará alternativas para salir de ella, definirá metas, buscará opciones, creará un plan de acción y mantendrá siempre activa la motivación.
Dependiendo de hacia dónde enfoquemos el coaching podemos encontrar tres modelos o clases:
El coaching para directivos: ayuda a desarrollar el potencial de los líderes y así alcanzar sus metas, produciendo un impacto positivo en las personas y en los resultados. Se realiza una evaluación al perfil de liderazgo, indicando tanto las fortalezas como aquellas partes que sea preciso desarrollar
El coaching para equipos: potencia los talentos del equipo, fortalece las relaciones entre los miembros, mejorando el clima laboral y, por ende, la productividad de la empresa.
El coaching organizacional: busca el logro de los objetivos estratégicos de la empresa, para ello se deben trabajar varios aspectos como la cultura organizacional, las relaciones entre las partes del sistema, los desafíos colectivos, y el trabajo coordinado y armónico para la consecución de las metas de la empresa.
Es necesario que las personas que reciben las sesiones de coaching en el ámbito laboral, participen de manera activa en las sesiones, ya que el coaching supone un acompañamiento al cambio, en este caso profesional, para mejorar en los resultados, objetivos o relaciones personales, pero no se pueden obtener resultados si se mantiene una posición pasiva, sino que deberán hacer el esfuerzo o actividades necesarias para poder producir el cambio que se pretende.
Por ello, es necesario analizar y profundizar de la situación de la que se parte, conectando con los intereses y valores personales de cada uno y en ocasiones es necesario analizar los elementos de la vida personal que influyen en el ámbito laboral.
Es importante conseguir un bienestar emocional o equilibrio que nos ayude a superar las posibles dificultades o estrés que pueda ocasionar el trabajo y para ello, en ocasiones se puede conseguir cambiando o introduciendo sencillos hábitos.
Para lograr el éxito con las sesiones de coaching se debe conseguir concretar los objetivos, identificar los cambios, y realizar en los plazos señalados cada una de las acciones necesarias para su consecución, siendo necesario un alto grado de compromiso en la participación y en la personalización de las sesiones.