Entrevista, una función importante para un reclutador
La revolución tecnológica vivida en los últimos años ha ido cambiando la forma, y ahora recursos humanos dispone de herramientas que facilitan la gestión de los diferentes procesos, entre ellos este del que vamos a hablar a continuación y que quizá sea uno de los más difíciles para el reclutador: la entrevista de trabajo.
Es más, ahora ya no tienen por qué ser presenciales, pudiendo realizarlas de forma online a través de herramientas digitales como Teams, Zoom…
Las entrevistas online exigen otro tipo de preparativos, como es la calidad de conexión a la red, asegurarse de la calidad de la imagen con una buena cámara y la ausencia de interrupciones durante la entrevista. También es importante cuidar el aspecto personal, siendo recomendable vestirse completamente como si se estuviera en una entrevista presencial, así como hacer ensayos mirando directamente a la cámara como si se mirase a los ojos de la otra persona y revisar el fondo, donde pueden aparecer elementos neutros o cualquier objeto o mobiliario siempre que se ofrezca un aspecto profesional.
No obstante, sea presencial o telemática, hay una cosa que no cambia: una entrevista hay que prepararla con antelación. Pero, cuidado, las dos partes deberán trabajarla previamente, tanto el candidato o candidata como el reclutador que la vaya a realizar.
Ya no funciona la idea de que el reclutador lleva el peso de la entrevista (dirige, pregunta, hace y deshace…). Los dos son igual de protagonistas en ella.
Además, la entrevista varía en función del número de participantes, de la técnica o de su estructura. Veamos a continuación las características de cada tipo.
Tipos de entrevista según el número de participantes
Como hemos comentado, existen diferentes tipos de entrevistas laborales y dependiendo del número de quienes participan, estas pueden ser:
- de panel: un grupo de entrevistadores de le empresa realizan la entrevista, al mismo tiempo, y a un solo candidato.
- en línea: diferentes personas de la empresa, generalmente con diferentes cargos, van entrevistando al candidato o candidata, uno a uno.
- dinámica de grupo: es cuando el reclutador plantea un problema concreto y un conjunto de candidatos discuten, debaten e intentan solucionarlo. De estas dinámicas, el reclutador puede extraer diferentes conclusiones de los participantes como su creatividad, imaginación, talento y aptitudes de liderazgo.
Tipos de entrevista según la técnica
Las técnicas que podamos emplear dan lugar a un tipo de entrevistas de las que hablamos a continuación:
- Evaluación del comportamiento: se utiliza para saber cómo se comportó la persona entrevistada ante una situación concreta en su trabajo anterior.
- Por casos: es cuando se le da una situación concreta a la persona entrevistada y se le pregunta cómo manejaría o resolvería dicha situación o problema comercial.
- De estrés: se utiliza para conocer y evaluar cómo responderá la persona antes una situación de estrés y bajo una presión extrema. Cuidado, algunas preguntas pueden ser inapropiadas, conflictivas, incluso agresivas.
- Basadas en competencias: se utilizan para evaluar las habilidades sociales y las competencias interpersonales como resiliencia, comunicación, decisión, liderazgo y trabajo en equipo. Para responder deberás utilizar ejemplos.
- En vídeo: este método permite grabar las respuestas y evaluar talento. Verifica que funciona correctamente tu cámara y micrófono y cuidado con el atuendo, deberá ser correcto como si fuera presencial.
- Vía telefónica: se puede utilizar como paso previo a las entrevistas personales. Importante: no tener distracciones, escuchar atentamente (no interrumpir ni hablar demasiado) y hablar con claridad.
- Durante la comida: en este tipo de entrevista, más informal, el entrevistador o entrevistadora observará cómo interactúas con la persona que charla contigo y con otras personas, incluido el personal de servicio. Debes mantener una buena conversación y no olvidar el motivo inicial de dicho encuentro.
Tipos de entrevista según la estructura
Otro criterio para tener en cuenta en el momento de realizar una entrevista es la estructura de esta. Veamos algunos ejemplos:
- Estructurada: se utiliza para procesos de selección masivos, sin tiempo para estudiar de forma privada cada candidatura, y donde el modo de actuar está super estructurado y automatizado previamente.
- Libre: es el caso contrario al anterior, aquí el reclutador tiene muy claros los objetivos que requiere el puesto, así como las habilidades y aptitudes que son precisas en la persona candidata, pero no sigue ningún guion estipulado y se deja guiar por la improvisación.
- Mixta o semiestructurada: es un compendio de las dos anteriores. Existirá una parte improvisada de preguntas abiertas y, por otra parte, hay otra con preguntas estructuradas para profundizar en los aspectos relevantes. Este tipo de entrevista es la más completa.
- Entrevista Millennial: este tipo de entrevista la utilizan gigantes como Apple, Amazon, Google…, en estas, que a simple vista pueden parecer un sinsentido, se evalúan cuestiones como la imaginación, la creatividad, las habilidades y la improvisación desarrolladas por cada persona candidata en responder a las preguntas de una forma eficiente.
En ocasiones, dentro de un mismo proceso de selección se pasa por distintos tipos de entrevistas, donde pueden intervenir diferentes personas: RR. HH., responsables del departamento o la realización de pruebas de carácter práctico.
Para las personas candidatas es importante llevar una misma argumentación en las distintas entrevistas, ofrecer la información de manera ordenada y no caer en contradicciones ni lapsus de fechas o información.
En estos casos, el entrevistador, además de la información objetiva sobre la experiencia o formación que consta en el currículo vitae, tiene la oportunidad de valorar otras competencias como la expresión oral, la empatía, la vocación o las expectativas que el candidato o candidata puede tener para una determinada posición.
Otro tipo de entrevistas
También existen otro tipo de entrevistas como las simuladas, como preparación previa, o las de salida, cuando la persona trabajadora va a quedar libre de contrato, o decide ella misma dejar la empresa.
- Simuladas: si se quiere obtener un buen resultado y estar preparado o preparada para una entrevista de cualquier tipo, lo esencial es que previamente, y bajo la supervisión de un asesor profesional, un consejero o un asesor de contratación, prepares, revises, evalúes y perfecciones todo tipo de entrevistas.
- De salida: es lo contrario a una entrevista laboral, ya que sería una entrevista si decides dejar tu empresa o vas a quedar «libre». A la empresa le sirven para conocer la opinión sobre esta, mejorar su cultura empresarial y optimizar las relaciones con la plantilla. En estos casos, es importante que respetes el preaviso —normalmente de 15 días— para que la empresa pueda reorganizar la distribución de las funciones a terceras personas y no causar ningún perjuicio en la dinámica de funcionamiento normal de la empresa o el equipo.
Con independencia del tipo de entrevista, es importante que las candidatas o candidatos realicen una pequeña investigación sobre la empresa u organización: su actividad, productos y servicios, proyección, últimas noticias, premios, cultura empresarial, etc., ya que dicha información puede servir para plantear cuestiones interesantes y ofrecer los datos más alineados con los valores de la organización.
En resumen: Ante toda esta información es posible que sea difícil elegir cuál de todos estos tipos de entrevistas será la más adecuada para nuestra empresa. La elección está en la diversificación de estas, así como en la destreza del reclutador para escoger la entrevista más adecuada a cada perfil requerido y a cada situación.
