Qué es el compromiso de los empleados/as
Para que el compromiso de los empleados sea uno de los valores que identifiquen a la plantilla, debe existir un historial o recorrido en la forma de gestionar la empresa que haya demostrado que existe confianza en las personas trabajadoras.
Así, el compromiso se obtiene a lo largo de un periodo de tiempo medio-largo, y deben contener distintos elementos.
Es necesario que el compromiso se traslade a todos los niveles de gestión, desde los directivos a los mandos intermedios, ya que la plantilla representa el engranaje necesario para que se pueda desarrollarse la actividad y conseguir los objetivos deseados y una plantilla comprometida se traduce en una mejora de los resultados.
Compromiso, implicación, satisfacción, motivación, son cuestiones claves en una empresa porque nos indican el comportamiento de los empleados de la misma.
Como decimos, son claves y determinantes en el resultado (mayor productividad, mejor atención y calidad); sin embargo, no se puede «ver» lo que conlleva ya que en algunas empresas no se les de la importancia que realmente tienen.
Vamos a centrarnos en dos: compromiso y satisfacción, que pueden parece lo mismo, pero no lo son.
Diferencias entre compromiso y satisfacción
Como decíamos, no son lo mismo, mas ¿qué los diferencia? Comenzaremos por definir cada una de ellas.
• Satisfacción en el trabajo. Definido por John Locke (filósofo y médico inglés, 1976) como un «estado emocional positivo y placentero de la percepción subjetiva de las experiencias laborales de un sujeto», también fue muy utilizado por Eduardo Punset en sus libros. Es decir, el balance obtenido entre lo «esperado» y lo «obtenido», donde las cuestiones personales y laborales van unidas, será el que nos de satisfacción o insatisfacción.
• Compromiso con la empresa. Es el vínculo que une al trabajador con la empresa. Y como todo vínculo establecido, tiene diferentes visiones o puntos de vista que analizamos en el siguiente punto.
Compromiso del empleado
Como decíamos, este «compromiso» del empleado es un concepto mucho más amplio. Es un vínculo afectivo y de lealtad con la empresa, todo esto dependerá de una importante labor desarrollada previamente por el departamento de RR. HH., logrando establecer unas buenas relaciones entre las personas de la empresa, así como el contar con una cultura empresarial, algo imprescindible.
Pero, como ya comentábamos en el punto anterior, este compromiso se puede valorar desde tres puntos de vista:
• Compromiso afectivo: dependerá de la convicción y aceptación de los objetivos y valores de la organización; del esfuerzo dispuesto a realizar en beneficio de esta; y del fuerte deseo de permanencia como empleado en la empresa.
• Compromiso de continuidad: cuando el empleado sabe y es consciente de los costes que lleva el dejar de estar en la empresa.
• Compromiso normativo: depende del sentimiento de obligación que tiene el empleado hacia la empresa, pensando que «es lo correcto, lo que debe hacer».
Los empleados valoran ser parte de algo con propósito
Si un empleado está motivado, se apasiona y se involucra al realizar su trabajo, no cabe duda, se siente parte de la empresa y, por tanto, siente ese compromiso con la empresa, pero también la conexión emocional con las personas que trabaja.
Cuando se consigue una plantilla comprometida, es mucho más fácil resolver problemas, trabajar en equipo, solucionar imprevistos y mejorar los objetivos. La mejora de los resultados, la satisfacción del cliente, son elementos que la persona trabajadora identifica con su trabajo, hacen que se sienta parte de la empresa.
En otras palabras, dada la importancia de este compromiso de los empleados y de que puede fluctuar al ser también emocional, es crucial para la empresa el medir dicho compromiso y así mantenerse al día con las necesidades de su personal.
Sí, no es fácil ni sencillo, será una tarea ardua, complicada y sometida a muchas variables, que también exigirá perseverancia y continuidad en análisis e innovación.
Los objetivos de tu negocio no se pueden centrar solo en generar ventas y obtener ingresos. Necesitas mostrar integridad.
Esta integridad se consigue fomentando y modelando los valores fundamentales de la empresa, es preciso que el trabajador se enorgullezca de trabajar en ella.
Para lograr esto hay que fomentar el desarrollo personal, la relación empleados y empleadores, así como apoyar los objetivos de cada persona, logrando que se sienta valorada y motivada a crecer (tanto como persona como laboralmente) dentro de la propia empresa.
¿Cómo lograr esto? A continuación, vamos a conocer ocho estrategias para lograr aumentar el compromiso de nuestros empleados con la empresa.
8 estrategias para aumentar el compromiso de los empleados
Como decíamos, lograr que los empleados sientan que son parte de la empresa, es primordial para los buenos resultados de esta, ya que esto sí impulsará la rentabilidad, la productividad y la retención de tu entidad. La plantilla, cuando se considera parte de la empresa, se considera que su trabajo influye en los resultados y por tanto, tendrá motivación para mejorarlos.
Para que exista el compromiso de los empleados se deben dar una serie de elementos, debiendo partir desde la individualidad de cada persona trabajadora a la consideración del conjunto de la empresa. Por tanto, a nivel individual deben sentirse únicos, cuidados, con reconocimiento en su trabajo y con la suficiente confianza para exponer cuestiones controvertidas o comprometidas.
Por otro lado, las condiciones laborales influyen en el compromiso, así, debe existir un equilibrio entre el trabajo y la retribución, además de tener identificadas otra serie de compensaciones o privilegios, incluido el salario emocional. El establecimiento de medidas de conciliación familiar o la flexibilidad, también van a influir en el compromiso, ya que va a permitir a la persona trabajadora compaginar el trabajo con la vida personal.
Ahora vamos a conocer las 8 estrategias a tener en cuenta a la hora de aumentar el compromiso del empleado:
1. Modelado de los valores fundamentales y de la misión de la empresa: el empleado está más comprometido cuando tiene un objetivo que respaldar y un propósito que lo inspire, y esto forma parte de la «cultura de empresa». Las personas tienen unos valores personales que las identifica y para ser congruente consigo mismo, se tienen que identificar con los valores de la empresa.
En cuanto a la gestión de la empresa, para generar el compromiso de la plantilla, se debe identificar con ciertos valores, como son: la congruencia en la toma de decisiones, la transparencia en la gestión y la sistematización de los procesos, ya que son cuestiones que generan la seguridad y compromiso, es decir, si ante una determinada circunstancia, la persona trabajadora sabe cómo se tiene que actuar, se generará la confianza, el compromiso y la seguridad en la gestión, en caso contrario, si ante una determinada situación, cada vez se gestiona de una forma distinta o se toman diferentes decisiones, se provocará incertidumbre, elemento incompatible con el compromiso.
2. Cuidar la comunicación a todos los niveles. Los empleados anhelan la retroalimentación y esto influye en su nivel de compromiso. Nunca es demasiada la comunicación, y la persona trabajadora la estima y necesita. Programar encuentros entre el empleado y su gerente, así como con los mandos intermedios, mejorará esa retroalimentación. Pero cuidado, cada grupo de trabajo es diferente, por tanto, no establezcas una política obligatoria de encuentros (retroalimentación) en la empresa, mucho mejor que sean empleados y mandos intermedios quienes elijan sus métodos preferidos para recibir dichos comentarios, de esta forma será importante para ellos y se involucrarán más.
3. Concentrarse en involucrar a la dirección. No debemos de olvidar que los niveles de compromiso entre los gerentes y los empleados están directamente relacionados con «el sentirse involucrado». Además de preocuparte por cada individualidad, centrarse en los mandos intermedios también es una manera eficaz de fomentar con rapidez la participación de los empleados, obteniendo una buena respuesta en todos los sectores.
4. Alinear la actividad de la empresa con la Responsabilidad Social Corporativa. Empresa y sociedad, una relación tan importante y, en ocasiones, tan olvidada. Sin embargo, para el trabajador es importante conocer si trabaja para una empresa que se preocupa por contribuir de forma positiva a la sociedad.
En la actualidad, a las empresas se les exige que con sus beneficios contribuyan de alguna manera al bienestar social, de forma que el compromiso de la empresa con la sociedad o el medioambiente influye de manera directa en el compromiso de las personas trabajadora con la empresa.
5. Dar prioridad a la salud física y mental. Si la empresa u organización se esfuerza por mejorar el bienestar general de sus empleados, es fácil para estos participar y sentir un mayor compromiso hacia su empresa. Patrocinar salidas de empresa y talleres de meditación, a la par que se les anima a fomentar estilos de vida saludables más allá de la oficina, y que se abastece su lugar de trabajo de refrigerios que alimenten y aligeren su ajetreada jornada laboral.
6. Reconocer a los mejores y recompensar los logros. Los empleados que se sienten comprometidos con su empresa hacen todo lo posible por hacer un esfuerzo adicional. Pero quieren saber que los mandos ven y aprecian dichos esfuerzos. Promover el reconocimiento positivo en toda la empresa, día a día, deberá ser una dinámica de retroalimentación a instalar.
7. Realice encuestas sobre el compromiso de los empleados con frecuencia. Si recordamos, en el punto «Los empleados valoran ser parte de algo con propósito», ya comentábamos la importancia de medir día a día el nivel de compromiso de los empleados para poder actuar conociendo las necesidades del personal. Esto permitirá comprender qué funciona en la organización y, lo más importante, qué cambiar para que los empleados se sientan valorados. Los empleados deben tener voz para poder comunicarse y opinar, de esta forma estaremos fomentando una comunicación abierta y honesta.
8. Planificar salidas de empresa. La conexión fuera y dentro de la empresa de los empleados es muy importante. Fomentar esa comunicación patrocinando y planificando salidas de empresa es un elemento aglutinador. No se precisa una inversión importante, se puede organizar una hora feliz, una noche de juegos, una cena compartida, una sorpresa inesperada, pero sin olvidar incorporar variedad para que fomentar la inclusión y participación de todo el personal.
De esta forma, los compañeros y compañeras de trabajo tienen la oportunidad de estar en un ambiente distendido, conocer afinidades, situaciones familiares y facilitará la confianza entre ellos, que ayudará a empatizar.
Las personas, a pesar de desenvolvernos en distintos ambientes, laboral, familiar, amistades, etc., siempre somos la misma, con las mismas necesidades, inquietudes y problemas, por lo que darse a conocer de manera íntegra ayuda a cohesionar todas las facetas de la vida.
Estrategias a largo plazo para mejorar la participación de los empleados
Como ya hemos visto, tener una buena planificación es importante y, por ende, contar con una estrategia sólida de participación de nuestros empleados es esencial.
No obstante, si aún no cuentas con una bien consolidada, aquí te mostramos cinco puntos a implementar para mejorar el compromiso de los empleados:
• Mejora tu proceso de incorporación. Proporciona a los empleados una incorporación efectiva en las primeras semanas de trabajo o desconectará. Debe tomarse un tiempo en explicarles los matices del equipo, los objetivos y valores de empresa, así como el propósito de su tarea o puesto. Nunca pienses en este tiempo como pérdida, al contrario, un empleado comprometido será mucho más productivo a posteriori.
Aunque para la difusión a nivel masivo de la actividad o imagen de una empresa, se utilizan los numerosos medios digitales y redes sociales, no debemos olvidar, que cada persona que trabaja en nuestra empresa es uno de los mejores medios para difundir la imagen de marca.
El cuidar los procesos de las personas que se encuentran en la plantilla, de las nuevas incorporaciones y de las que finalizan la relación laboral, va a determinar el tipo de discurso que pueda dar de la empresa cada persona que tenga o haya tenido relación laboral con la misma.
Así, va a influir en el compromiso de la plantilla cómo se comporta la empresa con cada trabajador, de forma que si se toman decisiones arbitrarias sin que exista un contexto claro y definido, será difícil generar el ansiado compromiso.
• Ofrece oportunidades para forjar las trayectorias personales y el desarrollo profesional. Si el empleado siente que está progresando en su carrera tiene más probabilidades (20%) de seguir teniendo el mismo empleo en un año. Tener la opción de crecer logrará empleados más comprometidos, lo que también permitirá retener a los mejores talentos. No olvidemos que el saber que la empresa valora sus talentos es un factor añadido de «motivación para los empleados»
La consideración del puesto de trabajo con una proyección de futuro en la empresa, determina el compromiso, la persona trabajadora debe tener satisfechas las expectativas profesionales actuales y futuras, con la capacidad de promocionar o crecer profesionalmente, es decir, debe existir una visión a largo plazo.
En todo caso, se debe intentar eliminar el sentido de ser un «mal necesario» o «trabajo nutricional», aquel que únicamente nos permite conseguir los ingresos suficientes para atender las necesidades de la vida.
• Evalúa los procesos y aborda las ineficiencias. Ralentizar los procesos puede costar ingresos y esto es, en muchos casos, debido a tareas innecesarias, lo que lleva a algo aún peor: «la frustración de los empleados». Para ello se debe actuar con el objetivo y la mentalidad de optimizar los procesos e implementar recursos que les permitan, a los empleados, tener éxito en sus funciones. Esto se consigue analizando y buscando formas de aligerar las operaciones para lograr el éxito a largo plazo.
• Brinda flexibilidad a los empleados. Los horarios flexibles y el trabajo en remoto (teletrabajo) aumentan el compromiso de los empleados. Si el trabajador ve que su empresa le brinda la oportunidad de ajustar sus horarios para lograr un equilibrio entre su vida laboral y privada, se sentirá más comprometido porque el respeto y la consideración son muy importantes para él.
• Capacita a los gerentes en las mejores prácticas de participación de los empleados. Este punto nos permite finalizar este artículo tratando un tema visto en el inicio, la conexión entre los mandos intermedios y los gerentes con los trabajadores. Si ves que no existe o se puede mejorar, promueve herramientas para ello. Por ejemplo, puedes ofrecer seminarios de desarrollo de liderazgo y programas de capacitación para equipar mejor a los gerentes para sus funciones.
Desde otro punto de vista, las empresas realizan en cada empleado una inversión, dedicando tiempo a enseñar el desempeño de las funciones que le proporcionará experiencia, mediante la formación, la posición y contactos, etc. que se deben saber aprovechar y potenciar para que revierta en la actividad de la empresa.
Recuerda: el compromiso del empleado no es un proyecto temporal, sino que mantener su compromiso e involucrarlo supone un esfuerzo importante y constante.