La Escuela Integralia nació en el año 2013 como una herramienta determinante que apoya el fin fundacional: la inclusión laboral de personas con discapacidad. Mediante la formación, se ayuda a construir y enriquecer a las personas en una faceta que por distintos motivos no ha sido accesible a una gran parte de la población con discapacidad y que representa un freno en su desarrollo profesional y personal. Además, también supone una segunda oportunidad para aquellas personas con discapacidad sobrevenida que llevan años buscando un empleo por su dificultad de acceso al mercado laboral.
A finales de 2012, la Escuela Integralia creó un plan de estudios enfocado, no sólo a formar expertos profesionales que trabajasen en un centro de atención al cliente, sino a satisfacer necesidades más relevantes; cultivar la mente, el intelecto, el espíritu y convertir la formación en la herramienta principal para un proceso de inclusión efectivo que convirtiera el desarrollo personal en un itinerario formativo satisfactorio y enriquecedor.
Compromiso de inserción
Formar a profesionales con discapacidad para su desarrollo laboral es el objetivo de la Escuela Integralia. Por ello, los cursos que realizan conllevan un compromiso de inserción de los alumnos dentro del plazo de seis meses a partir de la finalización de la disciplina. Además, la formación en la Escuela Integralia cumple una función social para el desarrollo personal de los alumnos.
Las actividades que se llevan a cabo comienzan con dinámicas de reclutamiento y selección de alumnos. Tras ello, se forma de manera básica a todos los seleccionados en telemarketing y en distintas especialidades, como son banca, seguros, utilidades y telecomunicaciones. Después de recibir la formación, los alumnos realizan prácticas en empresas y se efectúa un acompañamiento en la inserción de las empresas. Otra tarea desempeñada es la captación de empresas y clientes para la incorporación de estos alumnos, es decir, organizaciones reales donde puedan realizar sus prácticas y, posteriormente, incorporarse al mundo laboral.
Además, gracias a la incorporación de la Fundación Integralia al programa «Incorpora» de la Obra Social «la Caixa», la Escuela ha podido desarrollar dos proyectos formativos en Marketing Digital y Desarrollo WordPress, atendiendo a las necesidades de las empresas de encontrar mano de obra cualificada en el sector digital, algo que, sin duda, determinará el mercado laboral en un corto período de tiempo.
Más que docentes
Los docentes son personal propio. Se seleccionan agentes, coordinadores, supervisores, equipo de Recursos Humanos que son expertos en las áreas de formación que imparten, ya que están día a día en contacto con los servicios. Esto aporta gran valor al alumnado, además de motivarles y estimularles al ver que sus formadores son personas que, como ellos, poseen algún tipo de discapacidad y se encuentran plenamente incorporados en el mundo laboral. El objetivo de estos profesionales es introducir a sus alumnos en la dinámica de una compañía y mejorar sus aptitudes profesionales, para que una vez en el mercado laboral puedan tener las mismas oportunidades de acceder a un puesto de trabajo.
Solo en 2018, la Escuela Integralia ha podido formar a 140 alumnos con discapacidad, de los cuales 85 pueden disfrutar hoy de un trabajo, bien sea en nuestros propios centros o en empresas ordinarias.