La realidad de las personas con discapacidad en la India es desoladora, provengan de donde provengan las cifras. El último censo nacional de 2011 estableció que la población con discapacidad en la India era de 21 millones de personas. Sin embargo, otras instituciones supranacionales como el Banco Mundial estiman que pueden llegar a los 80 millones, 25 veces la población de Madrid. Casi dos veces la población de España.
La ciudad de Anantapur, al sur de la India en el Estado de Andhra Pradesh, es una de las regiones más pobres del país. Allí la Fundación Integralia apoya el trabajo de Rural Development Trust (la contraparte de Fundación Vicente Ferrer en la India). La ya de por sí difícil situación de las personas con discapacidad para incorporarse al mercado laboral se acentúa si encima provienen de una población vulnerable y de las castas más bajas de la India. Es por ello que uno de los grandes trabajos que tienen que desempeñar las entidades sociales que trabajan con personas con discapacidad es, en primer lugar, la sensibilización.
Mónica Arazo, la cooperante de la Fundación Integralia responsable de los proyectos en la India, realizó durante esta semana dos jornadas de sensibilización con los directivos y mandos intermedios de las distintas áreas de Rural Development Trust (RDT). Los asistentes pudieron compartir algo más sobre el contexto de las personas con discapacidad: la discriminación a la que se enfrentan diariamente, la legislación al respecto en India, la terminología, los diferentes modelos de inserción laboral, los beneficios de la contratación por parte de las empresas, etc… Fueron unas jornadas de aprendizaje donde, más allá del gran reconocimiento y experiencia de RDT/FVF en la lucha contra la discriminación del colectivo de la discapacidad en la India, se abre la posibilidad de una mayor incorporación de personas con discapacidad a trabajar dentro de la misma organización RDT.
Por otro lado, durante esta semana, también ha comenzado las entrevistas de selección de los futuros alumnos y alumnas de la Escuela Profesional de RDT-FVF, que este año contará con hasta cuatro cursos. Para estos cursos se han seleccionado por el momento hasta un total de 69 personas con discapacidad, un auténtico logro teniendo en cuenta la gran dificultad de hallar los perfiles necesarios para acceder a ellos. “Ha costado un gran trabajo llegar a este número”, nos cuenta Mónica Arazo desde Anantapur.
La Escuela Profesional proporciona una formación que permite a los alumnos acceder más fácilmente al mercado laboral: formación intensiva en idiomas, informática, mantenimiento, desarrollo personal, competencias trasversales para el empleo o técnicas para la búsqueda activa de empleo. Desde que la Fundación Integralia iniciara en partenariado con RDT/FVF este programa en la India, un total 441 personas de sectores vulnerables (entre ellas 179 con discapacidad) han sido formadas en la Escuela Profesional, de las cuales 127 (43 de ellas con discapacidad) han sido insertadas en el mercado laboral. Además, gran parte de estas personas son mujeres que pertenecen a las castas más bajas y tribales y que están condenadas desde que nacen por el mero hecho de ser mujeres.
La implicación de Mónica Arazo en este programa junto con el equipo de RDT está siendo decisiva, tanto para conseguir estos resultados como para ayudar a generar autoconfianza en los jóvenes de estas comunidades rurales en la búsqueda de empleo y sensibilizar al profesorado y equipo gestor de la Escuela Profesional y de RDT en todo el ciclo del proceso de formación, búsqueda de empleo e inserción con calidad. ¡Enhorabuena Mónica!