Aprende a ser consciente de todos tus recursos
La PNL o Programación Neurolingüística fue creada por los americanos Richard Bandler y John Grinder en torno a los años 70.
Decidieron investigar y describir una conducta humana, de una forma diferente a lo que se estaba haciendo en su época. Encontrar la manera individual para cada persona y no agrupar de manera colectiva.
Querían saber qué diferenciaba a las personas exitosas de las que no lo eran. Decidieron observar a una mujer y tres hombres referentes en sus respectivos campos relacionado con la comunicación y el cambio en las personas; estos eran Virginia Satir (Terapia Sistémica), Milton Erickson (Hipnosis Clínica), Fritz Perls (Fundador de la terapia Gestalt) y Gregory Batenson (Comunicación Humana). En ellos y en sus trabajos analizaron los patrones de cambio y comunicación que usaban con sus clientes para ser más eficaces.
Sus conclusiones fueron que se podían codificar y aprender estas estrategias de éxito y enseñarlas a otras personas para producir un cambio positivo en ellas.
La PNL no se trata de trucos mágicos ni de recetas milagrosas, su gran objetivo es poner a disposición de la persona más opciones a la hora de enfrentarse a sus desafíos vitales. Se puede ver a través del lenguaje cómo es la maquinaria interna de una persona, descubrir sus objetivos y ayudarla a hacer los cambios necesarios para acercarse a sus metas de una manera más rápida. Al mismo tiempo, podemos aprender más de nosotros mismos mediante la auto-observación, aprender a pensar, aprender cómo funciono internamente, mis limitaciones, mis fortalezas, mis pensamientos, mis emociones y convertirnos en personas más eficaces. Se podría decir que la PNL es la ingeniería del comportamiento humano.
La podemos aplicar en muchas circunstancias como pueden ser fobias, miedos, bloqueos, gestión de emociones, etc. A través de este sistema, se logra resultados eficaces, tales como automotivación, confianza, armonía, pérdida de miedos, etc.
Me gustaría explicaros de una manera más gráfica como funciona nuestra neurología. Imaginemos que tenemos delante de nosotros una araña, ¿qué representación está haciendo ahora mismo tu neurología? Quizá estés pensando que esa araña te va a picar o te va a hacer algún daño, o por el contrario no le das importancia, incluso la puedes ver bonita…
En el caso de que la veas como una amenaza, debido a tus experiencias, creencias, etc. ¿Qué diálogo interno estás teniendo? Seguramente no será positivo y en ese momento es fácil que te pongas nervioso, que te tenses,… Por el contrario, si la ves como un animal bonito, tu diálogo será positivo y tu manera de actuar será diferente, probablemente la observarás, la mirarás e incluso hasta le haces una fotografía…
El estímulo externo (la araña) es el mismo para los dos casos pero cada persona tiene una manera de procesar la información basada en sus vivencias.
Me gustaría que este pequeño ejemplo lo puedas extrapolar a situaciones del día a día, a tus objetivos de vida, etc. ¿Qué os hace sentir esa situación en particular o ese logro de un objetivo? ¿Qué diálogo interno estás teniendo? ¿Qué lenguaje estás utilizando? ¿Qué experiencias, valores o creencias hay detrás de esos pensamientos?
La Programación Neurolingüística tiene varias presuposiciones básicas, os voy a nombrar la más importante y que a mí personalmente me resulta muy interesante y efectiva a la hora de gestionar situaciones.
El mapa no es el territorio
Las personas tendemos a creer que nuestra manera de ver, escuchar, sentir la vida y el mundo es compartido por todas las personas que viven en él. Esto en la mayoría de los casos no es así. Incluso en una conversación diaria podemos llegar a no entendernos con otra persona y simplemente es porque se tienen modelos de mundo diferentes.
Cada persona construye su mapa en base a su infancia, aprendizajes, experiencias, continente donde ha nacido, etc.
Si yo os digo que en invierno hace frío y en verano hace calor, ¿estáis de acuerdo? Y si le preguntamos a un habitante del hemisferio sur, por ejemplo de Argentina, ¿pensaría lo mismo? No creo, ya que el verano ahí es de diciembre a marzo y el invierno de junio a septiembre. Por lo tanto, para ellos, en invierno hace calor y en verano hace frío.
También sabemos que en los entierros vestimos de luto y son tristes ya que perdemos a un ser querido, porque es lo que hemos vivido, aprendido y nos han enseñado. En la India, para los hindúes un entierro es motivo de alegría ya que es la puerta a una nueva vida y por ello visten con colores alegres y brillantes mientras cantan. Son diferentes maneras de ver y sentir una misma situación.
Y yo me pregunto si ahora que sabemos que nuestro modelo de mundo no es el único, te vas a sentir más abierto a comunicarte contigo mismo y con otras personas de manera diferente.
“Tú no eliges la circunstancia que te ha tocado vivir, pero si la actitud con que la enfrentas” Robert Dilts
Silvia Blancas
Coach y Practitioner en PNL. Colaboradora del ecosistema de DKV Integralia